El Instinto, es decir: lo Animal
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Cuando Freud descubre el Mito/Concepto de PULSIÒN nos está también indicando -ya desde su bautismo ideomático- que no hay ninguna posibilidad de pasaje de lo Natural a lo Cultural. Por eso el término utilizado por Freud es TRIEB y no INSTINKT: ambos términos existen en Alemán; si Freud utiliza el primero en vez del segundo, es -justamente- para recordarnos que la Pulsión no tiene nada que ver con el Instinto. Por eso es parcial; por eso es autoerótica, por eso es de Muerte. Si existiesen Pulsiones de Vida (como aún hay analistas empeñados en leer) existiría el instinto. Puesto que el INSTINTO, por definiciòn, es de la Especie; se dirige a un objeto especìfico (alimentaciòn y sexo; es decir: conservación) y siempre se apacigüa con la satisfacciòn..
De ahi que la traducciòn de López Ballesteros no es correcta y los analistas preferimos adoptar la de José Luis Etcheverry. Podemos escoger para TRIEB la jurisdicción de DERIVA (que en inglés se impone con Drive y es por la cual Lacan se inclina). Este Retoño -empujado Repetición mediante por la Demanda del Otro- es (en términos freudianos) lo que conocemos como la descarga de displacer (que no se reprime) y por el cual el Sujeto -en afánisis total; es decir: abolido- es tomado e investido. De allí que todo goce implique una salida muda y ciega. (Lacan dirá: Las pulsiones son mudas; sin embargo -básicamente bajo la forma de Síntoma- el Analista las escuchará bajo transferencia.)
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La Pulsión, por definiciòn, gira en torno a un vacío -que Lacan ha bautizado (a)- que sirve como excusa para que el tour se (in)complete. Por eso la Pulsión -siempre de Muerte- se alimenta de Goce. Y lo que se le opone es, obviamente, el DESEO. De ahi que el ejemplo del dibujo up supra sea redondo como imagen gráfica de que en lo Animal sí existe el Instinto de Vida, valga el pleonasmo.
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Un Sujeto, en cambio, justamente por estar sujetado a la Cultura -al Goce del Otro-; y justamente porque el matema de la Pulsión se escribe (S <> D) donde el Sujeto hace fading en la Alienación/Separación de y con la Demanda del Otro; rompe el estatuto de la Conservación y produce el Acting que toda Pulsión ejerce.
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De ahi que frente a los avatares pulsionales; no existe conservaciòn de nada: un Sujeto puede perder su alimento, puede perder su empresa, puede perder tres casas en un Bingo, puede perder su pareja, puede morir por exceso de alimento o por carencia: pero lo que no estará dispuesto a resignar -al menos que pueda Castrarse- es su Narcisismo. La Pulsión manda. El YO (y el SuperYo), netamente libidinal -como ha demostrado Freud a partir de 1914 con Introducciòn al Narcismo- harto más allá de un organizador, controla y goza al Sujeto. De ahi que Lacan ha dicho que el YO es la única enfermedad del parêltre. Y también -en función de esta condescendencia del Goce al Deseo- ha expresado -en el Congreso de Bonneval-: "...es preciso que el Goce sea perdido para que pueda ser alcanzado en lo que respecta a la Ley del Deseo."
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marcelo augusto pérez
Diciembre / 2010
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