en el principio...
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Saludos desde Euskadi...
Hola Marcelo, encantado de saludarte!
He visto varias veces tus videos y quería agradecerte semejante trabajo. Lo cierto es que en este, a veces, a menudo, siempre, tortuoso camino del aprendizaje psicoanalítico se agradece infinitamente la aparición de cierta cantidad de energía luminosa que permita pasar, al menos, una noche al calor de la agradable sensación del sentido para, a la mañana siguiente, continuar a tientas el camino de esta apasionante aventura.
Quería consultar tu opinión sobre lo siguiente…
Últimamente pienso mucho en ese pasaje del evangelio de San Juan “Al principio era el verbo…” y la relación con el pensamiento lacaniano y psicoanalítico.
(((((((((Pienso también en lo que tiene esto que ver con Buda y con la ilusión del mundo.
Parece que al principio fue el verbo, antes que el mundo. Es decir, no podemos saber qué es lo que hay hasta que lo nombramos. El mundo comienza a existir una vez lo hemos nombrado. Antes de eso…
Quizás por eso Buda define el nirvana únicamente como lo que no es. Porque no es algo que pueda definirse. No pertenece a esta especie de alienación de las palabras y el lenguaje.
Parece que el mundo en el que vivimos es un mundo demasiado humano, limitado a este extrañísimo asunto que es el lenguaje. Una especie de mundo ilusión en el que nada es lo que parece y en que debemos comportarnos y actuar como si lo fuera.
Como decía William Blake: “Si las puertas de la percepción…”.
A medida que voy avanzando en este pensamiento que trato de trasladarte me voy dando cuenta de algo que ya pensaba al principio pero que no recordaba. Cada vez me interesan y entiendo menos las cosas que me rodean. Telediarios, opiniones, discusiones intelectuales, ideologías…sólo me interesa salir adelante con mi familia, tocar y escuchar música, hacer deporte....y alejarme del caos de las palabras y el pensamiento.
Me gusta la idea de escapar el lenguaje a través, quién sabe, si de la meditación, la danza giratoria, la repetición de algún mantra o de la ingesta de setas alucinógenas…pero hay que regresar y asentarse de nuevo en el lenguaje para sacar adelante a la familia y a uno mismo. Entrar y salir, salir y entrar…
No sé qué pensar del lenguaje. Es un virus como decía Burroughs???
Es algo a lo que tratar de sonreir??...con lo que llevarse mal??..algo de lo que habría que huir???....es una cárcel??? Una herramienta???...
Como te he dicho antes, cada vez me interesan menos las discusiones intelectuales…no me aportan. Me relajo…miro el cielo y trato de olvidarme.
Como si fuera una inmersión en el océano (de las palabras). Cojo aire, me sumerjo y disfruto de ese mundo tan caótico, que tanto aporta y que tanto quita. Se me termina el aire y salgo fuera (Para no ahogarme). Pero no se muy bien qué hay fuera del lenguaje…claro…cómo saberlo…
Al principio era el verbo…jejeje…qué asunto este el de ser humano…)))))))))
Hola Marcelo, encantado de saludarte!
He visto varias veces tus videos y quería agradecerte semejante trabajo. Lo cierto es que en este, a veces, a menudo, siempre, tortuoso camino del aprendizaje psicoanalítico se agradece infinitamente la aparición de cierta cantidad de energía luminosa que permita pasar, al menos, una noche al calor de la agradable sensación del sentido para, a la mañana siguiente, continuar a tientas el camino de esta apasionante aventura.
Quería consultar tu opinión sobre lo siguiente…
Últimamente pienso mucho en ese pasaje del evangelio de San Juan “Al principio era el verbo…” y la relación con el pensamiento lacaniano y psicoanalítico.
(((((((((Pienso también en lo que tiene esto que ver con Buda y con la ilusión del mundo.
Parece que al principio fue el verbo, antes que el mundo. Es decir, no podemos saber qué es lo que hay hasta que lo nombramos. El mundo comienza a existir una vez lo hemos nombrado. Antes de eso…
Quizás por eso Buda define el nirvana únicamente como lo que no es. Porque no es algo que pueda definirse. No pertenece a esta especie de alienación de las palabras y el lenguaje.
Parece que el mundo en el que vivimos es un mundo demasiado humano, limitado a este extrañísimo asunto que es el lenguaje. Una especie de mundo ilusión en el que nada es lo que parece y en que debemos comportarnos y actuar como si lo fuera.
Como decía William Blake: “Si las puertas de la percepción…”.
A medida que voy avanzando en este pensamiento que trato de trasladarte me voy dando cuenta de algo que ya pensaba al principio pero que no recordaba. Cada vez me interesan y entiendo menos las cosas que me rodean. Telediarios, opiniones, discusiones intelectuales, ideologías…sólo me interesa salir adelante con mi familia, tocar y escuchar música, hacer deporte....y alejarme del caos de las palabras y el pensamiento.
Me gusta la idea de escapar el lenguaje a través, quién sabe, si de la meditación, la danza giratoria, la repetición de algún mantra o de la ingesta de setas alucinógenas…pero hay que regresar y asentarse de nuevo en el lenguaje para sacar adelante a la familia y a uno mismo. Entrar y salir, salir y entrar…
No sé qué pensar del lenguaje. Es un virus como decía Burroughs???
Es algo a lo que tratar de sonreir??...con lo que llevarse mal??..algo de lo que habría que huir???....es una cárcel??? Una herramienta???...
Como te he dicho antes, cada vez me interesan menos las discusiones intelectuales…no me aportan. Me relajo…miro el cielo y trato de olvidarme.
Como si fuera una inmersión en el océano (de las palabras). Cojo aire, me sumerjo y disfruto de ese mundo tan caótico, que tanto aporta y que tanto quita. Se me termina el aire y salgo fuera (Para no ahogarme). Pero no se muy bien qué hay fuera del lenguaje…claro…cómo saberlo…
Al principio era el verbo…jejeje…qué asunto este el de ser humano…)))))))))
Crees que de este pasaje bíblico puede desprenderse la idea de un mundo más allá del lenguaje y las palabras???
Muchas gracias por todo Marcelo.
Cuídate
Un saludo!
Muchas gracias por todo Marcelo.
Cuídate
Un saludo!
Jon
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.Hola Jon... De Euskadi... mirá vos... Que hermoso lugar...
Me gustó mucho leer tu correo. Con tu permiso lo voy a postear en mi blog.
El lenguaje es algo de lo que ningún humano puede escapar, al igual que lo inconsciente; por eso Lacan decía que ES la condición de lo inconsciente: primero el lenguaje, después lo inconsciente. Tus palabras me recuerdan a esto que yo digo con otras palabras (ya ves que no se puede sin palabras): vivir el hoy. Tu pregunta apunta a la Pregunta Final (o Inicial) de toda filosofìa, creo: ¿Hay (A)lgo antes y después de esta vida, más allá de las palabras? No soy hermeneuta -y mi agnosticismo me juega en contra- pero puedo contestarte desde el lugar más folclórico y secular que tiene un sujeto: no lo sé. En este mundo -al menos- no hay ninguna realidad pre-discursiva. Que -como digo siempre- primero está lo Cultural y después lo Natural: no hay manera de aprehender el mundo sin el aparato lenguajero que, a la vez, marca el paso de la Naturaleza a la Cultura constituido por la Prohibición del Incesto, es decir, por el Edipo y su Complejo de Castración; es decir que el FALO es -como expresó Lacan- lo que anuda lo real al significante.
Un cordial saludo, marcelo.
Me gustó mucho leer tu correo. Con tu permiso lo voy a postear en mi blog.
El lenguaje es algo de lo que ningún humano puede escapar, al igual que lo inconsciente; por eso Lacan decía que ES la condición de lo inconsciente: primero el lenguaje, después lo inconsciente. Tus palabras me recuerdan a esto que yo digo con otras palabras (ya ves que no se puede sin palabras): vivir el hoy. Tu pregunta apunta a la Pregunta Final (o Inicial) de toda filosofìa, creo: ¿Hay (A)lgo antes y después de esta vida, más allá de las palabras? No soy hermeneuta -y mi agnosticismo me juega en contra- pero puedo contestarte desde el lugar más folclórico y secular que tiene un sujeto: no lo sé. En este mundo -al menos- no hay ninguna realidad pre-discursiva. Que -como digo siempre- primero está lo Cultural y después lo Natural: no hay manera de aprehender el mundo sin el aparato lenguajero que, a la vez, marca el paso de la Naturaleza a la Cultura constituido por la Prohibición del Incesto, es decir, por el Edipo y su Complejo de Castración; es decir que el FALO es -como expresó Lacan- lo que anuda lo real al significante.
Un cordial saludo, marcelo.
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